INTEGRIDAD
Existen cualidades humanas que se han ido perdiendo, y degradando, porque el mundo posmoderno así lo exige, y uno de esos es la integridad. Ese principio básico y elemental de respetarse a sí mismo, y respetar a los demás. Pero el mundo actual, que como lo he mencionado en otras oportunidades, funciona en un sentido contrario, porque no busca mejorarnos como especie, sino destruirnos hasta dejarnos irreconocibles, de tal forma que la deformidad resultante nos convenza que eso somos.
Hace unos días encontré un texto que lastimosamente no menciona quien es el autor, era una captura de pantalla de puro texto, se los comparto, y si conocen al autor, me lo hacen saber en comentarios, para colocar los créditos respectivos.
En un mundo que premia la ambición sin alma, la ausencia de principios, suele ser más rentable que la inteligencia.
Muchos dicen que ser el más listo no garantiza éxito, ni riqueza, y es verdad. Pero esa misma frase se usa para minimizar el valor de la inteligencia, del esfuerzo y del conocimiento. Porque si te preguntan quien quieres que te operé ~Un cirujano dedicado y preparado, o alguien que compró su título sin saber nada~, la respuesta será obvia. Y aún así vivimos en un mundo donde personas sin virtudes prosperan, porque no cargan con la ética, la responsabilidad, ni los límites que sí frenan a quienes se esfuerzan de verdad, avanzan no por talento sino porque están dispuestos a ignorar el daño, a cruzar líneas y a tomar atajos que la gente integra jamás usaría. Por eso un taquero o un carnicero, puede ganar más que alguien virtuoso; no porque la inteligencia valga menos, sino porque la vida económica premia no siempre premia el conocimiento, sino la ambición ~ a veces incluso la ambición sin alma.》
En este blog he compartido algo similar, 'Crear basura te hace exitoso', y 'Desde el mundo al revés '. Pará tener éxito acá y ahora necesitas ser pícaro, tramposo, tener mañas, no tenerte respeto a ti mismo ni a nadie, ser un patán, grosero, ignorante, que tú única cualidad sea el olfato para ubicar la malversación, rutas de enriquecimiento cuestionables.
Una vez conversaba con un conocido sobre este asunto, y me contra argumento 《 Si no lo haces tú, lo hará alguien más》 dejando entre ver qué está cuestión es pura costumbre, metido en la médula de la cultura social. Hacer dinero fácil, que la colectividad lo célebre, es síntoma de una sociedad enferma. No es nada sano estar adaptado a aquello que te destruye.
Comentarios
Publicar un comentario